En la pasada campaña electoral uno de los temas de debate entre las distintas fuerzas políticas que concurrían a las elecciones fue la opción a elegir para el futuro Centro de Arte “Baltasar Lobo”. Tan solo izquierda Unida defendía el proyecto de que dicho centro se ubicara en el actual cuartel de la Policía Municipal, situado en la Plaza Mayor, otros grupos apoyábamos otros espacios y, de no ser posible, defendíamos el proyecto liderado por la Asociación de Amigos de Baltasar Lobo de hacer un Centro de Arte en el Castillo de Zamora.
En 1999 el Ayuntamiento de Zamora firmó un convenio con las hermanas de Lobo que donaron a la ciudad las obras del taller de París y las existentes en la Fundición Bonvicini (Verona) a cambio de que el Ayuntamiento pagara una parte de los impuestos a la hacienda francesa.
Han sido y son muchas las vicisitudes de este proyecto, recorriendo varios equipos municipales y varios Acaldes, pero nos encontramos hoy, en julio de 2023. Estamos pagando 100.000 euros al año de alquiler del museo temporal o interino en la Casa de los Gigantes desde 2009, es decir desde hace 15 años.
El equipo de gobierno actual, o mejor dicho el Partido mayoritario en el equipo de gobierno defiende desde hace años la opción del Museo de Lobo en el actual cuartel de la Policía Municipal, acogiendo una propuesta del anterior equipo de gobierno del Partido Popular, cuya idea era esa, pero como opción temporal hasta construir un nuevo museo para el artista de Cerecinos.
El legado de Lobo está integrado por 872 obras artísticas, distribuidas entre 750 esculturas (182 piezas de bronce, 465 modelos de yeso, 15 piezas de arcilla, 65 piezas de mármol y 23 piezas de otra índole: moldes, peanas y piezas de alabastro, marfil y piedra) y 122 dibujos. El Museo proyectado por el Ayuntamiento en el Viejo Ayuntamiento consta de 612 metros cuadrados, 318 para exposición permanente, 75 para exposiciones temporales y 70 para almacén. Parece claro lo imposible de hacer un Museo adecuado a la obra de Lobo en ese espacio.
Hoy nos encontramos con un tema enquistado, en el que Izquierda Unida se obceca, de manera testaruda en una opción que nadie quiere y que nadie ve como elemento de dinamización del casco Antiguo ni que sea el Centro de Arte que Lobo merece en la ciudad de Zamora.
El pasado 5 de julio los candidatos de IU y del PSOE firmaban un acuerdo de Gobierno con distintos puntos, uno de ellos era el 14 en el que en materia de cultura en el que decían esto “en cuanto al museo de Baltasar Lobo, se plantea la creación de un grupo de trabajo para, en el plazo de 3 meses, se estudien las diferentes posibilidades existentes con sentido práctico y realista para la puesta en marcha del Museo Baltasar Lobo”. La línea roja anunciada en campaña por el candidato socialista sobre que el Museo de Lobo no iría en el cuartel de la Policía Municipal cambiaba de color para pasar a línea invisible: todo con tal de llegar al acuerdo de gobierno y al reparto de puestos. Por cierto, cabe recordar al bipartido que de esos 3 meses ya ha pasado casi uno de ellos.
Está claro que Zamora no quiere el Centro de Arte de Lobo donde el Ayuntamiento pretende ubicarlo, toda la corporación municipal que somos los representantes de la ciudad ha de buscar una solución consensuada a esta enquistada deuda con el artista.
Por todo lo anteriormente expuesto, el Grupo Municipal Popular del Ayuntamiento de Zamora propone para su aprobación los siguientes
ACUERDOS
1.- Dejar en suspenso todos los trámites municipales tendentes a la materialización de la puesta en marcha del Museo de Lobo en el actual Cuartel de la Policía Municipal sito en la Plaza Mayor.
2.- Que el Pleno del Ayuntamiento de Zamora, en base a lo establecido en el art.69 del Reglamento Orgánico Municipal, proceda a la creación de una Comisión Informativa Especial para estudiar la ubicación del legado del escultor Baltasar Lobo, con la representación de todos los grupo políticos municipales, igual que en el resto de comisiones, en la que se puedan citar a expertos en la materia, renunciando los distintos representantes a las indemnizaciones reglamentariamente recogidas para esas sesiones.
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